Se trata de un hotel rural muy bonito, pero algo anticuado de mobiliario.

Pedimos cama doble y 2 individuales porque viajabamos con niños mayores, cuando llegamos nos encontramos que le pusieron un sofá cama con un 'diminuto' colchón de 2 cm. de grosor. Las criaturas se levantaron con dolor de espalda! Aparte, no tienen wifi si no es 'pagando'. En la época en que vivimos ésto nos pareció 'abusivo', pues teníamos que pagar por cada móvil que quería coger la señal wifi en el hall (porque encima el wifi no llegaba bien a la habitación).

La habitación cuadruple enorme con dos plantas. Una habitación y un baño por planta. Las camas y almohadas comodísimas. El desayuno genial.

Si no llevas GPS puede ser complicado de encontrar. El taxi desde aeropuerto Ciampino 40 euros y por la noche 60 euros